¿Qué es la práctica de la gratitud y cómo llevarla a cabo en tu día a día?

practicar la gratitud

Si nos paramos a observar hay muchas razones por las que podemos sentir agradecimiento. Para empezar, el hecho de que nuestro corazón lata es un regalo que nos ha sido dado, no hemos tenido que trabajar duro para lograrlo. Tenemos un corazón latiendo y trabajando a nuestro servicio 24 horas al día y la mayoría de personas lo damos por hecho e infravaloramos la suerte que tenemos. Entonces, ¿cómo podemos practicar la gratitud? ¿Cómo podemos comenzar la práctica de la gratitud? Al principio puede que no te salga de forma natural agradecer porque no has entrenado tu atención para que se focalice en todas las razones que hay para agradecer. Te recomiendo dos ejercicios para comenzar a practicar la gratitud: 1. Diario de Gratitud: Puedes empezar la práctica de gratitud escribiendo. Por ejemplo, antes de dormir puedes escribir en el diario entre 3 y 5 razones por las que sientes agradecimiento por ese día. Uno de los errores más comunes a la hora de realizar este ejercicio es que se convierte en una especie de ‘lista de la compra’ donde cada noche enumero las mismas razones por las que se supone que debería sentir agradecimiento, pero no conecto emocionalmente con nada. Ej: Agradezco tener salud, tener a mi familia, tener una casa,etc. Son cosas importantes pero no estoy conectando con el sentimiento de agradecimiento. Por eso, algo que suele funcionar es concretar. Cuanto más específica sea la práctica de agradecimiento, más fácil será sentir la emoción. Ej: Agradezco ese comentario que me ha hecho hoy mi pareja que me ha ilusionado, agradezco ese paseo que me he dado al sol, ese momento de descanso en el que he podido parar a meditar unos minutos, tomarme un té calentito y recargar las pilas, etc. 2. Carta de Gratitud: Otro ejercicio que tiene muchos beneficios es poner la gratitud en práctica con los demás. A menudo cuando agradecemos lo hacemos de forma muy generalizada: ‘Gracias por todo’ y tampoco nos paramos a conectar desde la vulnerabilidad. Por eso, recomiendo el ejercicio de la carta de la gratitud. La idea es que conectes con una persona hacia la que sientas agradecimiento. Piensa en las acciones que esa persona tomó para enriquecer tu vida y escribe una carta en la que especifiques todo lo que sientes. Una vez que la tengas, y en la medida de lo posible, la idea es entregarla en persona y leerla en alto. Esto tendrá un efecto muy positivo tanto en la persona que lo recibe como en ti. ¿Cuáles son los beneficios de la práctica de la gratitud? Cada vez hay más estudios que demuestran que la práctica de la gratitud tiene muchísimos beneficios. Nos ayuda a apreciar y a valorar el presente. Se magnifican las sensaciones de bienestar y satisfacción. Fortalece el sistema inmunológico. Aumenta la resistencia al estrés. Mejora la calidad del sueño. Aumenta nuestra compasión y generosidad. Reduce sentimientos de soledad. Nos ayuda a perdonar. A menudo se dice que es el pegamento que mantiene a las personas unidas. No es compatible sentir envidia y gratitud al mismo tiempo. A nuestro sistema emocional le gusta la novedad y por eso enseguida se adapta, la gratitud nos ayuda a no dar la vida por hecho y valorar que estamos aquí.